Do you believe?

I don't believe in perfect love. But I do believe that there are people whose lives are inextricably intertwined.



Dawson's Creek

lunes, 23 de enero de 2012

CONTINUA EL CARNAVAL

Hoy, ahora, a la una y veinte de la madrugada; mientras descansa la decepción en el disfraz de la ironía, mi voz en off busca desesperadamente tomar el control.



Y no quiero, resisto inútilmente...porque yo quería hacer hoy poesía y me temo que de aquí saldrá una tragicomedia barata.



Me río para mis adentros, me mofo de mi ansiedad, me burlo de mis sentimientos. Total, ¿cómo tomarse en serio algún sentimiento depositado en manos de la ironía?



¡No, no! Mejor aun, ¿cómo cuidar con esmero un sentimiento entregado a quien lo perdió de camino? Fíjense, ejemplo claro y conciso, espero: compras un ramo de flores hermoso, exuberante y fresco, lo entregas con mucho cariño a alguien que creías especial y vez como ese capullo, siempre sonriente (todo sea dicho) lo coge y lo planta en la basura de atrás y, ¡atención! CONTINÚA SONRIENDO MIENTRAS HACE EL TÍPICO GESTO ATONTADO CON LAS MANOS DE "YA ESTÁ".



¿Sorry? ¿What is it?



Vaya...¡qué desastre! Me temía una sublevación de este tipo por parte de mi subconciente...yo sólo quería hacer un poco de poesía. ¿Estoy a tiempo? Probemos.






Una cálida mañana



se despertó la ironía



al descubrir lángidamente



que de amor nadie moría.






Buscó atropelladamente



algún gesto con valía



mas sólo entre escombros halló



¡nada!...se lo temía.






Sonriente continuó su búsqueda



del príncipe azul galopante



y topó de bruces, frente a frente,



con un Don Quijote de gran talante.






No hubo manera contra la rendición



de su idiota corazón atolondrado



a contraluz luchó con ilusión



contra el mástil de un molino anclado.






Y no hubo más hazaña por contar



que la tranformación de su príncipe



el cual, sin un beso formal,



tornó gris y poco apetecible.






La ironía (ahora) despierta



se pregunta con tesón



¿si Don Quijote ya no lucha



por qué debo hacerlo yo?






Ahora con un poco de seriedad, ¡que quiero poesía!



Esta es la buena: La idiotez del ser humano sólo casa con la prepotencia de quien se cree del doble filo un gran maestro en potencia.






Con salud, Marina

No hay comentarios:

Publicar un comentario